¿Sabías que hay menos tolerancia hacia el acoso sexual y más apoyo para quienes lo denuncian? Este es uno de los cambios que provocó el movimiento #MeToo desde su comienzo en 2017, según un estudio del Pew Research Center. A menudo las víctimas y las personas sobrevivientes del abuso y acoso sexual eran difamadas o no se les creía. Ahora, quienes han sufrido acoso sexual en el trabajo son más alentadas a denunciar.
El movimiento #MeToo, conocido en español como #YoTambién, fue impulsado por la actriz Alyssa Milano, quien motivó a las personas a compartir en redes sociales sus experiencias de acoso y agresión sexual usando el hashtag #MeToo. Este movimiento surgió como respuesta a las acusaciones de abuso sexual contra el productor de cine Harvey Weinstein.
No obstante, el miedo, la vergüenza y la presión social pueden hacer que el acoso sexual en el trabajo a menudo no sea denunciado. Por tal motivo, es crucial recordar que todas las personas tenemos el derecho a trabajar sin sufrir acoso sexual. Este tipo de acoso puede provocar incomodidad y angustia, además de generar traumas que pueden afectar tanto en lo laboral como en tu vida personal y en la de tus seres queridos.
En este artículo, te informamos sobre el acoso sexual en el lugar de trabajo y qué puedes hacer si necesitas ayuda legal en español.
¿Qué es el acoso laboral?
Antes de abordar específicamente el tema del acoso sexual en el trabajo, es crucial entender un concepto más amplio: el acoso laboral. Este es reconocido como una forma de discriminación laboral por la Comisión para la Igualdad de Oportunidades en el Empleo (EEOC, por sus siglas en inglés). Dicha discriminación infringe varias leyes federales que protegen a los empleados, tales como Título VII de la Ley de Derechos Civiles de 1964, la Ley de Discriminación por Edad en el Empleo de 1967 y la Ley de Estadounidenses con Discapacidades de 1990.
El acoso laboral puede manifestarse de varias formas y afectar a cualquier persona. Este tipo de acoso incluye comentarios ofensivos, insultos, bromas y burlas; amenazas y actitudes intimidatorias; insinuaciones sexuales no deseadas, agresiones y contacto físico no solicitado; la difusión de gestos o imágenes ofensivas; y otras conductas inapropiadas.
Para considerarse acoso laboral, la conducta debe ser lo suficientemente grave o frecuente como para crear un ambiente de trabajo intimidante, hostil u ofensivo. Además, esta conducta no debe afectar tu capacidad para desempeñar tus tareas laborales. Es ilegal que se te obligue a tolerar este tipo de comportamiento como condición para mantener tu empleo.
Existen también leyes estatales que ofrecen protecciones adicionales. Por ejemplo, en California, la Ley de Empleo Justo y Vivienda prohíbe el acoso laboral, definido como cualquier conducta no deseada basada en características protegidas de una persona, que incluyen, entre otras, raza, color, religión, género, identidad de género o expresión de género, origen nacional, ascendencia, edad (para personas de 40 años o más), discapacidad, condición médica, sexo, orientación sexual, embarazo, información genética y estado militar o de veterano.
Estas leyes también prohíben el acoso en represalia por denunciar discriminación, participar en investigaciones o litigios, o por oponerse a prácticas de empleo discriminatorias.
¿Qué es el acoso sexual en el trabajo?
El acoso sexual en el trabajo representa una forma de discriminación basada en el sexo, identidad de género, orientación sexual o expresión de género. Este tipo de discriminación viola la ley federal bajo el Título VII de la Ley de Derechos Civiles de 1964. Es importante destacar que el acoso sexual puede manifestarse tanto entre personas del mismo sexo como del sexo opuesto, independientemente de su orientación sexual, identidad o expresión de género.
De acuerdo con la EEOC, “el acoso no tiene que ser exclusivamente de naturaleza sexual, sino que también puede incluir comentarios ofensivos sobre el sexo de una persona. Por ejemplo, es ilegal acosar a una mujer al hacer comentarios ofensivos sobre las mujeres en general”.
Hay dos tipos de acoso sexual ilegal:
- El acoso sexual “quid pro quo” (“algo a cambio de algo”, en latín) ocurre cuando una persona condiciona la obtención de un empleo, un ascenso o cualquier otro beneficio laboral a la aceptación de insinuaciones o conductas sexuales.
- El acoso sexual que crea un “ambiente de trabajo hostil” se presenta cuando comentarios o comportamientos sexuales no deseados afectan injustificadamente el rendimiento laboral de alguien o generan un entorno de trabajo intimidante, hostil u ofensivo.
Lo que también necesitas saber sobre el acoso sexual en el trabajo:
- El Título VII no protege a todas las personas que están empleadas. Los trabajadores cuyos empleadores tienen menos de 15 empleados, los contratistas independientes y los individuos autónomos no están protegidos del acoso sexual en el trabajo por esta ley federal.
- Si alguien es testigo de una conducta ofensiva, también puede ser víctima de acoso sexual en el trabajo incluso si la persona no es acosada directamente.
- Es ilegal que un empleador que esté cubierto por el Título VII tome represalias contra un empleado por presentar una denuncia de acoso sexual en el trabajo o por participar en una investigación.
- Los empleadores tienen la responsabilidad de tomar medidas para prevenir y corregir el acoso sexual que ocurre en el ámbito laboral.
Ejemplos de acoso sexual en el trabajo
El acoso sexual en el trabajo puede provenir de diferentes individuos dentro del entorno laboral, incluyendo a un jefe, gerente o supervisor de la víctima, supervisores de otras áreas, compañeros de trabajo, o incluso personas externas como clientes o proveedores. Asimismo, el acoso sexual puede ocurrir en distintos sitios, incluyendo en el lugar de trabajo como una oficina, negocio y establecimiento público, en un evento laboral que se lleva a cabo en otro lugar, o durante viajes de trabajo.
Los comportamientos que pueden ser considerados acoso sexual abarcan una variedad de acciones inapropiadas, como:
- Contacto físico o agresiones no deseadas.
- Exhibición de material erótico o pornográfico con contenido sexualmente explícito o sugerente.
- Gestos o miradas de índole lasciva que tienen una connotación sexual explícita o sugestiva.
- Insinuaciones sexuales inapropiadas o no deseadas.
- Solicitudes de favores sexuales a cambio de beneficios laborales.
- Contar historias, chistes o hacer comentarios sobre actividades sexuales.
- Comentarios sexualmente explícitos o despectivos acerca del sexo, género, identidad de género, orientación sexual o expresión de género de una persona.
¿Qué hacer cuando alguien te acosa sexualmente en el trabajo?
Es crucial denunciar el acoso sexual en el trabajo. Al hacerlo, no solo puedes buscar justicia y una compensación justa, sino también generar un cambio social significativo. Las víctimas del acoso no solo se enfrentan a sus agresores, sino que también pueden empoderar a otras personas para buscar justicia. Este acto de valentía ayuda a cambiar la cultura de silencio y tolerancia hacia el acoso laboral.
Si enfrentas acoso sexual en el trabajo, hay determinadas medidas que puedes tomar:
- Comunica: Si sientes que es seguro, puedes decirle a la persona que está haciendo algo que consideras inapropiado, intimidante, hostil o abusivo que pare, ya sea en el momento o en una conversación posterior para dejar en claro que el comportamiento es no deseado.
- Registra: Ya sea que experimentes un incidente aislado o acoso recurrente, escribe los detalles cada vez que ocurra. Incluye la fecha y la hora, quién te acosó, dónde tuvo lugar, quién –si alguien– lo presenció, y qué se dijo o se hizo.
- Denuncia: Lee la política de acoso de tu empleador y síguela para denunciar un incidente. Si tu empleador no tiene una política o procedimiento, considera reportar el acoso a un supervisor, representante sindical o a alguien de recursos humanos. Si la primera persona a la que lo reportas no actúa, repórtalo a otra persona. Guarda todas las comunicaciones de trabajo y toma notas de todas las conversaciones.
- Contacta a un abogado: Una vez documentados los incidentes, es importante contactar a un abogado con experiencia en casos de acoso sexual en el trabajo. Los abogados de nuestra red te pueden ofrecer una evaluación inicial de tu caso sin costo y orientarte sobre los pasos a seguir.
- Denuncia a la EEOC: Por lo general, antes de iniciar un reclamo o demanda judicial, debes contactar a la EEOC o a la oficina local de la EEOC para presentar una queja. Puedes presentar una denuncia de acoso en línea o en persona dentro de un plazo de 180 días posteriores al incidente. Ten en cuenta que algunos estados tienen leyes que extienden este plazo a 300 días.
Los daños y perjuicios en un caso de acoso sexual
La compensación que una persona puede recibir en casos de acoso sexual en el trabajo puede variar dependiendo de varios factores y circunstancias, incluida la gravedad del acoso, los daños sufridos y la legislación local aplicable. Las víctimas pueden obtener una indemnización por las pérdidas sufridas como consecuencia de salarios perdidos, daños emocionales (tales como angustia, dolor y sufrimiento), gastos médicos, y más.
Un abogado puede investigar los hechos, formular una estrategia legal sólida y ayudarte a presentar la documentación necesaria para maximizar tu compensación.
Daños punitivos en un caso de acoso sexual en el trabajo
En los litigios laborales, incluyendo aquellos relacionados con el acoso sexual, a veces se pueden solicitar daños punitivos adicionales. El propósito de estos daños es castigar al demandado y disuadir a otros de tener comportamientos similares. Para obtener estos daños, la víctima debe demostrar que el demandado actuó de manera intencionada, maliciosa o atroz, características que a menudo se encuentran en los casos de acoso sexual en el trabajo.
Por ejemplo, supongamos que un jefe ha sido sexualmente agresivo con una empleada, tocándola inapropiadamente a pesar de sus reiteradas negativas. Pero al quejarse la empleada ante su empleador, éste le dice que “deje de quejarse” y hace todo lo posible para proteger al jefe y destruir las pruebas. Este comportamiento puede considerarse atroz y malicioso como para justificar una indemnización punitiva.
Los tribunales tienen la facultad de conceder o no los daños punitivos adicionales. Por ello, es crucial trabajar con un abogado experimentado que sepa cómo desarrollar una estrategia legal para luchar por obtener daños punitivos y maximizar tu compensación. Por ejemplo, si tu demanda por acoso sexual tiene un valor de $80,000, podrías tener derecho a $600,000 en daños punitivos, sumando un total de $680,000 en indemnización.
Es importante que te pongas en contacto con un abogado lo antes posible después de que se hayan violado tus derechos en el lugar de trabajo. Recuerda que la ley te da 180 días para presentar una denuncia ante la EEOC y se pueden aplicar otros plazos según las distintas agencias de empleo estatales.
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Sabemos que denunciar el acoso sexual puede ser un proceso difícil, pero queremos que sepas que no tienes que pasar por esto a solas. Si fuiste víctima de acoso sexual en el trabajo, los abogados de nuestra red están disponibles para brindarte la ayuda legal que necesitas en español.
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