El tema del acoso, también conocido como hostigamiento, es relevante en diversos ámbitos de la vida cotidiana, desde el entorno laboral hasta el escolar. Al hablar de este concepto en inglés, es importante entender tanto su traducción como el contexto en el que se utiliza. A continuación, te explicamos cómo se traduce “acoso” en inglés y te damos algunos ejemplos.
¿Cómo se traduce “acoso” en inglés?
El término “acoso” en español se traduce comúnmente como “harassment” en inglés. Este término abarca una amplia gama de conductas inapropiadas o abusivas, que pueden ser de tipo verbal, físico o psicológico.
De acuerdo con el Cambridge Dictionary, harassment se define como “comportamiento que molesta o acosa a alguien, especialmente de manera repetitiva o persistente”. Es un término que puede utilizarse en diversos contextos, desde situaciones de trabajo hasta redes sociales y la vida diaria.
Tipos de acoso, incluyendo el acoso sexual, y su traducción al inglés
El acoso puede manifestarse de diversas formas y, según el tipo de situación, existen diferentes términos para referirse al acoso en inglés. A continuación, te mostramos algunos ejemplos:
- Acoso laboral (workplace harassment): Se refiere a las conductas abusivas en el entorno laboral. Por ejemplo, comentarios ofensivos, discriminación o intimidación constante.
- Acoso sexual (sexual harassment): Se refiere a cualquier tipo de comportamiento de índole sexual no deseado que incomoda o agrede a una persona.
- Acoso escolar (bullying): En contextos escolares, el término que se utiliza en inglés suele ser bullying, que describe el abuso o maltrato entre estudiantes.
- Acoso físico (physical harassment): Conducta que involucra el uso de la fuerza o contacto físico no deseado.
- Acoso psicológico (psychological harassment): Acciones que buscan afectar el bienestar emocional de una persona.
- Acoso verbal (verbal harassment): Uso de palabras ofensivas o insultos para intimidar o menospreciar a alguien.
- Mobbing (mobbing): Conducta intencional destinada a causar miedo o angustia emocional a individuos, destacando sus graves implicaciones en entornos laborales y educativos.
Para comprender mejor cómo se manifiesta el acoso en el entorno laboral, es importante profundizar en su definición legal y las implicaciones que tiene para los empleados y empleadores.
¿Cuál es la definición de acoso laboral?
El acoso laboral se define como cualquier conducta no deseada en el entorno de trabajo basada en características protegidas de una persona, como raza, color, religión, género, identidad de género, expresión de género, origen nacional, ascendencia, edad (40 años o más), discapacidad, condición médica, sexo, orientación sexual, embarazo, información genética o estado militar o de veterano.
Según la Comisión para la Igualdad de Oportunidades en el Empleo (EEOC, por sus siglas en inglés), “el acoso es una conducta no deseada que está basada en la raza, el color, la religión, el sexo (incluyendo orientación sexual, identidad de genero y embarazo), el origen nacional, la edad (40 años o más), la discapacidad o la información genética (incluyendo historia médica familiar)”.
Este tipo de acoso se convierte en ilegal cuando tolerar la conducta se convierte en una condición continua para conservar el empleo, o la conducta es suficientemente severa o generalizada como para crear un ambiente de trabajo que una persona razonable consideraría “intimidante, hostil o abusivo”.
Esta definición está respaldada por leyes federales como el Título VII de la Ley de Derechos Civiles de 1964, la Ley de Discriminación por Edad en el Empleo de 1967 y la Ley de Estadounidenses con Discapacidades de 1990, así como por leyes estatales como la Ley de Empleo Justo y Vivienda de California.
Además, las leyes antidiscriminación prohíben el acoso como represalia contra personas que presentan quejas por discriminación, participan en investigaciones o se oponen a prácticas laborales discriminatorias.
Formas en las que se puede manifestar el acoso laboral
El acoso laboral puede incluir:
- Comentarios ofensivos, insultos, bromas y burlas crueles.
- Amenazas y actitudes intimidatorias.
- Insinuaciones sexuales no deseadas.
- Agresiones y contacto físico no deseado.
- Difusión de gestos, objetos o imágenes ofensivas.
- Otras conductas ofensivas.
Por lo general, para que una conducta se considere acoso laboral ilegal debe ser lo suficientemente grave o repetitiva como para crear un ambiente laboral que una persona razonable consideraría intimidante, hostil o abusivo. Además, es ilegal si tolerar esta conducta ofensiva se convierte en una condición para conservar el empleo.
¿Qué tipo de situaciones no se consideran acoso?
Es importante entender que no todas las conductas indeseadas o desagradables en el lugar de trabajo constituyen acoso ilegal según la ley. Aunque ciertas acciones puedan ser incómodas o molestas para muchas personas, para que sean consideradas acoso deben cumplir con criterios específicos establecidos por las leyes laborales.
A continuación se detallan situaciones que, aunque pueden ser problemáticas, generalmente no se consideran acoso bajo la ley:
- Comentarios o incidentes aislados y de poca gravedad: Comentarios ocasionales, bromas aisladas o incidentes menores que no son severos ni generalizados no suelen calificarse como acoso ilegal. La ley generalmente requiere que la conducta sea repetitiva y lo suficientemente grave como para crear un ambiente de trabajo hostil.
- Conflictos de personalidad o desacuerdos laborales: Diferencias de opinión, desacuerdos sobre métodos de trabajo o conflictos personales no constituyen acoso si no están basados en una característica protegida (como raza, género, edad, etc.).
- Críticas o evaluaciones de desempeño legítimas: Las críticas constructivas o evaluaciones de desempeño desfavorables, cuando se basan en el rendimiento laboral y no en motivos discriminatorios, no se consideran acoso.
- Aplicación de políticas y disciplina laboral: Acciones disciplinarias, cambios en asignaciones laborales o aplicación de políticas de la empresa, siempre que se realicen de manera consistente y no discriminatoria, no constituyen acoso.
- Estilo de gestión estricto o exigente: Un supervisor o gerente que mantiene un estilo de liderazgo riguroso o que establece expectativas altas no está cometiendo acoso a menos que su conducta esté basada en discriminación hacia una clase protegida.
- Bromas o comentarios no dirigidos a una persona específica: Comentarios generales o bromas que no están dirigidos a una persona o grupo específico y que no están basados en características protegidas generalmente no se consideran acoso.
Es esencial reconocer que, aunque estas situaciones pueden no ser ilegales, pueden afectar negativamente el ambiente laboral y deben abordarse a través de los canales apropiados de recursos humanos o políticas internas de la empresa.
Nota: Si una conducta inicialmente considerada como menor se vuelve repetitiva o comienza a basarse en características protegidas, podría transformarse en acoso ilegal. Puede ser una buena idea documentar los incidentes y buscar asesoría legal si se siente que el ambiente de trabajo se vuelve hostil.
¿Cuánto cuesta contratar a un abogado que se encargue de una demanda por acoso?
Es común que los abogados que manejan casos de lesiones personales y disputas laborales, incluyendo casos de acoso laboral, trabajen bajo un esquema de honorarios condicionales. Esto significa que el abogado solo recibe el pago de honorarios si obtiene una compensación para el cliente, ya sea a través de un acuerdo o una victoria en un juicio.
Este modelo es ampliamente utilizado porque permite a los clientes acceder a representación legal sin costos iniciales, lo cual es especialmente útil en casos donde el cliente puede no tener los recursos para pagar honorarios por adelantado.
Porcentaje que suelen cobrar los abogados
Los honorarios de los abogados suelen oscilar entre el 25% y el 40% de la compensación obtenida por el cliente. Sin embargo, este porcentaje puede variar dependiendo del abogado, la complejidad del caso, y la jurisdicción. En algunos casos, especialmente si el caso se resuelve rápidamente mediante un acuerdo, el porcentaje puede estar en el extremo inferior del rango. Si el caso se prolonga y va a juicio, el porcentaje podría incrementarse.
Es fundamental que los clientes discutan y entiendan la estructura de honorarios antes de contratar a un abogado. La transparencia en los honorarios ayuda a establecer una relación de confianza y asegura que ambas partes tengan expectativas claras. Algunos abogados pueden incluir cláusulas específicas en el acuerdo de contingencia, como costos adicionales que podrían no estar incluidos en el porcentaje de honorarios. Es esencial leer y entender el acuerdo antes de firmarlo.
Por lo general, el sistema de honorarios condicionales incentiva a los abogados a esforzarse por conseguir la máxima indemnización para sus clientes. Esto se debe a que cuanto mayor sea la compensación que recibe el cliente, mayor será el pago para el abogado.
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Nadie debería soportar ningún tipo de acoso, y es esencial que actúes lo antes posible para detenerlo. Afortunadamente, en muchos casos, los empleados cuentan con protecciones legales que les permiten enfrentar el acoso laboral, y hay leyes que pueden ayudarte a obtener una compensación por los daños sufridos.
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